El uso de la contratransferencia como herramienta de diagnóstico

La contratransferencia, en términos prácticos, es la sensación que despierta el paciente en nosotros, a lo largo de la sesión o, en un momento determinado de ésta. Solamente la sensación, porque algunos autores tienden a atribuirle, erróneamente, la idea de que incluye lo que dicha sensación nos mueve a hacer.  

La contratransferencia es el efecto de la transferencia del paciente en nosotros y, esta última es, a su vez, el resultado de la movilización de fuerzas, a lo interno del paciente. Si entendemos esta secuencia de hechos, entonces, podemos  concluir que, a partir de la contratransferencia podremos inferir acerca de la movilización de fuerzas que ocurre a lo interno del paciente. 

Pero este hecho, que parece simple, no lo es. Para darle una utilidad como herramienta diagnóstica a la contratransferencia, hay que superar algunas barreras. Primero, la contratransferencia es un hecho inconsciente, es decir, está ocurriendo aunque no nos demos cuenta. Por consiguiente, para que sea útil, hay que hacerla consciente. Pero, ¿cómo lo hacemos? Para hacerla consciente, el clínico debe estar más pendiente de sí mismo, monitoreándose a intervalos, acerca de sus sensaciones internas. 

Segundo, la parte compleja de este asunto tiene que ver con la correcta identificación de los contenidos contratransferenciales, toda vez que éstos compiten con otros dos tipos de contenidos similares; los que vienen con nosotros de otros contextos ajenos al paciente y los que se generan con motivo del paciente pero, en forma de transferencias que van desde nosotros hacia él. La resolución de esta parte corresponde a las preguntas: Eso que siento, ¿es el resultado del actuar del paciente? O, ¿es algo que venía conmigo desde afuera? O, ¿es algo que estoy poniendo yo en el paciente? 

Puedo concluir que, sólo ejercitándonos constantemente en la puesta en la consciencia de las sensaciones que nos provoca el paciente y, discriminando si se trata de contenidos contratransferenciales, podemos encontrarle utilidad como herramienta de diagnóstico. La contratransferencia es un hecho de carácter universal, inevitable, que sigue una secuencia lógica que, entendida objetivamente, nos conduce, desde nuestra interioridad psíquica hasta la interioridad psíquica del paciente. Es una especie de portal que nos transporta a su dimensión.

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